lunes, 4 de octubre de 2010

Muere otro ciclista en al carretera... ¿Hasta Cuando?

 
Tomo su bicicleta la mañana del sábado, a primera hora, la lluvia por fin había dejado de caer. El día parecía esplendido para una mañana de ciclismo. Don Jorge Mejía, inicio el paseo en su bicicleta, el deporte que mas le gustaba, el que amaba, en el que las penas y los problemas se borraban momentáneamente tras los paisajes, paseando sobre los pedales, el sillín y el manillar. Como muchos, que entendemos de esto, no me dejaran mentir.

Bajó la Gloria, y pedaleo en la zona de Quezaltepeque, el Jabalí, la zona que a él mas le gustaba, retornó y emprendió regreso el camino a su hogar. Pero la tragedia estaba por llegar, don Jorge Mejia, confiando en la banda o calzada peatonal, fue cobardemente arrollado por un motorista a bordo de un camión cisterna, cuyo conductor se dio a la fuga dejando mal herido al ciclista, como si de un animal se tratara, no lo auxilio.

¿Hasta Cuando?Huyo como todo cobarde. Don Jorge se debatió dos días entre la vida y la muerte debido a los golpes y a las heridas recibidas. Lucho hasta el último segundo de su vida, como todo guerrero del asfalto, hasta que DIOS lo llamo, a su santo seno, para que dejara de sufrir, así don Jorge entrego el alma al creador.

La pregunta es ¿Hasta cuando?, nuestras autoridades tomaran cartas en el asunto, y crearan una legislación que defienda al ciclista y que eduquen a la decena de animales mal llamados motoristas, que a diario circulan por nuestras carreteras, causando dolor y muerte, ¿Hasta Cuando?

¿Hasta cuando? los mal llamados "padres de la patria o diputados", sanearan el sistema vehicular de nuestro país, dejando a un lado las componendas políticas y los intereses personales, para crear leyes que protejan la integridad físicas de los salvadoreños, llámense; peatones, transeúntes o ciclistas.

Don Jorge Mejia, ahora se une a una larga listas de ciclistas que dejaron sus vidas sobres sus bicicletas como; Patricio Merino, Walter Rieder, Edgar Smith, Carlos Sierra, Luís Vázquez. entre otros.

Nunca me cansare de pedir un monumento al ciclismo y en el grabar los nombres de aquellos valientes que han caído en las carreteras, y que hoy conforma el pelotón celestial, azul y blanco, como nuestra bandera.


Paz a quien en vida fuera, Don Jorge Mejia, buen padre, buen amigo y buen ciclista.